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Escritas sobre la imagen de la mujer, usada para publicitar la marca de ropa Nolita del grupo Flash&Partners, se leen las palabras: "No a la anorexia".
La imagen fue tomada por el polémico fotógrafo italiano Oliviero Toscani, quien en 1992 fotografió a un hombre muriendo de sida para una campaña del grupo de prendas de vestir Benetton.
El objetivo de Toscani fue "usar ese cuerpo desnudo para mostrar a todo el mundo la realidad de la enfermedad, provocada en la mayoría de los casos por los estereotipos impuestos por el mundo de la moda", dijo Flash&Partners en un comunicado.
"Todos dicen que es horrible, pero no creo que lo sea, realmente hace llegar el mensaje", opinó la transeúnte Giuseppina Ravelli tras ver el valla publicitaria en Milán. "La gente que llega a estos niveles tiene problemas tan graves que es bueno que se use su enfermedad para mostrar su experiencia a otros", agregó.
Pero la presidenta de la Asociación para el Estudio de la Anorexia de Italia, Fabiola De Clercq, dijo que la mujer usada para la fotografía debería estar en el hospital, y que la imagen es "demasiado cruda".
Lejos de ayudar a las mujeres que sufren de anorexia, la foto podría hacer que muchas de ellas sientan envidia por la modelo y tengan la determinación de volverse aún más delgadas que ella, añadió.
Las modelos ultra-delgadas obtuvieron el año pasado la atención de los medios masivos, luego que el Madrid Fashion Week prohibió en sus pasarelas a las jóvenes con índices de masa corporal por debajo de 18 (se considera "normal" al rango entre 18,5 y 25).
Milán anunció un nuevo código de conducta de pasarelas que obliga a las modelos a llevar certificados médicos e inauguró la semana de la moda con un espectáculo que puso de relieve a modelos con más cuerpo.
Isabelle Caro, la mujer francesa que aparece en la foto, ha sufrido anorexia durante 15 años, pesa 31 kilogramos y sufre soriasis en su piel. "Me escondí y me tapé durante mucho tiempo", declaró a la revista Vanity Fair en una entrevista que será publicada el miércoles.
"Ahora quiero mostrarme sin miedo, incluso aunque sé que mi cuerpo es repugnante", agregó. La campaña publicitaria ha recibido el apoyo del Ministerio de Sanidad italiano, y un comunicado de Nolita cita al ministro afirmando que puede "promocionar la responsabilidad hacia el problema de la anorexia"
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